miércoles, 24 de junio de 2009

miércoles, 6 de mayo de 2009

MANOS A LA OBRA

Lejos de casa continua su recorrida por el deporte mundial. En estos dos últimos programas, el turno fue para dos grandes competidores que actualmente viven en Europa. Dos tipos con mucho carisma que día a día trabajan para dejar en excelente posición al país. Pedro Ledesma (Rugby) y Guido Riccobelli (Handball) se pusieron manos a la obra y dejaron su sello para seguir sumándole onda a este programa.

A ambos se los nota divertidos. Consientes que son jugadores profesionales, que se deben a su club y a su trabajo. Pero igualmente, el 100% argentino que tiene adentro logra salir por algún lado y los dos muestran su costado nacional, con buena onda y mucho humor.

“En el supermercado capaz que te regalan alguna cosita”, arranco hablando entre risas Guido, jugador de handball ex River Plate que vive actualmente en Rubiera, pequeño pueblo ubicado al norte de Italia. Allí, este chico de 21 años comparte el plantel con otros dos argentinos con los que pasa la mayor parte del tiempo.

“Hay buena onda entre todos, pero con los argentinos es con los que más nos juntamos”, acota Pedro Ledesma, rugbier actual jugador del Stade de France y del combinado nacional de Los Pumas que confesó en exclusiva para Lejos de Casa que varias veces se quedó durmiendo afuera por olvidarse las llaves adentro de su departamento.

A la hora de ponerse serios, a ninguno se le mueve un pelo. “Jugar con la selección es lo que soñas desde chiquito, no lo digo poniéndome el cassete, pero es así”, aclara el pilar del equipo galo. “En diez o quince días me vuelvo, para poder entrenar con la selección”, concluye Guido demostrando que cuando la celeste y blanca levanta el teléfono, ambos están dispuestos a recorren los kilómetros necesarios.

Así pasaron dos lindas historias por Lejos de Casa. Divertidos, sueltos y con muy buena predisposición contaron cómo es su vida en el viejo continente. A los dos, mucha suerte y felicitaciones.


martes, 21 de abril de 2009

Lejos de Casa SIN LÍMITES

Entre tantas restricciones y límites, Lejos de Casa intenta desafiarlos. Por eso, Guido Pella rebelde jugador de tenis y Claudio Rossi, ex juez de línea del fútbol argentino estuvieron en lo que se podría denominar el mejor programa de FM de nuestro país o por lo menos, el que tiene más onda.


Ambos viven en rigor de líneas y límites. Mientras Guido Pella intenta seguir progresando en su prematura carrera tenística, atado a un rectángulo de no menos 25 metros con una red de por medio, Claudio Rossi, ya retirado en sus ocupaciones deportivas vivió su carrera al límite. Al costado de una línea de cal impartiendo justicia dentro de uno de los deportes más difíciles del planeta, el fútbol.

Los dos serán recordados por su pasó en este programa que tuvo su homenaje para ellos. Rossi, presente en citas mundialistas como Malasia 97 y Francia 98 recalcó que “es muy interesante viajar por el mundo y conocer nuevas culturas”, aunque dejó bien en claro que en Malasia por ejemplo, no probó bocado: “las comidas que nos daban eran muy feas hasta que me convencieron y me dijeron que me iban a dar carne parecida a la argentina. Al final era toda dura y no se podía comer”.

Ellos coinciden no sólo en las líneas a las que fueron atados de por vida, sino también a la hora de elegir ciudades del mundo. “París es la ciudad más linda que fui hasta ahora”, aclaró Pella y por supuesto Rossi estuvo de acuerdo.

Lejos de casa es así. Un día una joven promesa con olor a futuro dentro de un deporte individualista como el tenis. Al miércoles siguiente, un retirado juez de línea que además de conocer de cerca a figuras de la talla de Maldini y Hagi, sorprende con su tranquilidad para describir el mundo.

“Representar a mi país en el mundo, es algo increíble”, destaca Pella. Rossi no se queda atrás y se enorgullece cada vez que recuerda sus partidos en Francia y Malasia. “Ahí representábamos a todos nuestros compañeros en el arbitraje argentino”, sentenció.

El ciclo Lejos de Casa continúa. Ya pasaron grandes figuras que nos contaron muy ricas historias de cualquier rubro y aspecto. Seguiremos así, buscando deportistas o no pero que realmente cuenten el sabor y la nostalgia de representar al país nada menos que, lejos de su casa.

jueves, 2 de abril de 2009

domingo, 22 de marzo de 2009

“Gracias al rugby conoces lugares muy raros que no irías en tu vida”


Francisco Merello, subcampeón mundial con los Pumas Seven’s disputado en Dubai, charló en Lejos de Casa.

Confesó como fueron los festejos: “Se hizo una megafiesta en el hotel, estábamos con Coppola y con las chicas del rugby femenino. Pero a las 3 de la mañana cortaron la música, teniendo en cuenta que para un argentino esa es la hora que recién entras en calor, entonces después la seguimos en las habitaciones pero con música, baile muy tranquilo…”

Merello Habló de las repercusiones de la copa en La Argentina: “Hubo como una especie de sevenmania y eso le hace muy bien al rugby porque el Seven argentino es hoy el numero 2 del mundo y tiene mucho potencial”

El hombre de Regatas de Bella Vista también contó las expectativas para la quinta etapa del Circuito Mundial en Hong Kong y Adelaida: “El Seven está muy bien, estamos con una mentalidad y una racha ganadora. Hong Kong tiene el mismo formato que el mundial y es el torneo que más puntos otorga porque es donde mas equipos hay. Entonces es un torneo súper importante. Somos un equipo donde todos los jugadores tenemos un nivel muy parejo asique creo que nos va a ir muy bien”.

Además resaltó: “Gracias al rugby conoces lugares muy raros, muy exóticas que no irías en tu vida. Son lugares que solo el rugby te puede llevar y viajar también te da la oportunidad de hacer amigos, con los jugadores de rugby del mundo manejas los mismos códigos”

miércoles, 4 de marzo de 2009

“El Básquet es mi psicólogo”

¿Freud era fanático de Los Lakers? ¿Schopenhauer jugaba al NBA2009? Definitivamente no. Hernán Arias, basquetbolista de alma y vida, encontró en el deporte de sus amores, la forma más confortable de escaparse- aunque sea por un rato- a todos los problemas que genera el día a día. En Lejos de Casa, este alero de pasado xeneize cuenta- entre otras cosas- de qué se trató su experiencia en el básquet norteamericano.



En radio como en televisión, el tiempo viene acompañado del adjetivo “tirano”. Aunque parezca difícil de entender, una hora al aire para los que hacemos radio, se pasa sencillamente “volando” y al terminar cada Miércoles, muchas cosas quedan en el tintero. Entre ellas, preguntas, intrigas y muchas ganas de seguir contando historias que reflejan el verdadero espíritu de Lejos de Casa.

Esta vez el encargado de expresar los sentimientos de muchos argentinos fue Hernán Arias. Basquetbolista de raza, con pasado en Boca y en Regatas de Mendoza que durante la crisis post De la Rúa tuvo que emigrar a los Estados Unidos. Allí la pasión pudo más que el trabajo y Hernán comenzó su única experiencia internacional en la liga Green Game, para el Estado de Brooklyn.

“La verdad que jugar en Estados Unidos es increíble. Tenés otro incentivo, allá es el deporte nacional”, sentencia el flamante entrevistado y asegura que su ingreso al club en dónde disputó una temporada no fue nada fácil: “Al principio fue complicado. Participé de una pre-selección de 24 jugadores y yo era el único blanco. Quedé dentro del equipo aunque ellos dicen que los blancos no saltan”.

Dentro del marco de su complicado ingreso, Hernán asegura que entró “a los codazos”, en referencia a un curioso episodio del que fue protagonista en el cuál tuvo la mala fortuna (o no) de pegarle un codazo a un rival que se enojo mucho. “Fue sin intención, el hecho de estar jugando en un liga en Estados Unidos era un sueño para mí. Yo quería jugar y demostrar todo”, recuerda Hernán asegurando que el enfrentamiento siguió por varios partidos hasta que su rival se dio cuenta de que él quería solamente jugar (y no pelear).

“Viajar sólo es muy complicado”, aclara el ex Boca y Regatas y llega a una conclusión: “El básquet es mi psicólogo. Voy al choque, discuto, peleo, juego, voy desgastando un poco las tensiones que te genera el día a día”. Al analizar su experiencia fuera del país, Hernán Arias concluye que “Fue mi mejor momento como basquetbolista a nivel juego. Fue algo muy lindo y lo disfrute mucho”.

Argentina no está tan lejos de los grandes en materia basquetbolística. El segundo puesto en el mundial del 2002 y la medalla de oro en Atenas 2004 fueron los puntos más altos de esta generación dorada que completó podio en Beijing y cuarto puesto en la Copa del Mundo tres años atrás. “Ginóbili es muy reconocido en San Antonio”, aclara Arias y resalta que como persona “es muy carismático y sociable”.

La charla va llegando a su fin. El básquet, uno de los deportes más taquilleros en los últimos tiempos argentinos tiene su espacio en Lejos de Casa. Fue Hernán Arias que hoy, a sus 39 años tiene sus sesiones de psicología todos los miércoles para el Club Tortuguitas de la liga de Capital Federal y espera, por varios años más, seguir yendo “al psicólogo”.

lunes, 2 de marzo de 2009

“Atrás del fútbol hay muchas cosas”

El futbolista Matías Di Paolo charló con “Lejos de casa”. El enganche de 23 años habló de sus inicios en River, contó como fue estar lejos de casa con tan solo 16 años y confesó los entretelones del fútbol.

Matías, ¿Por dónde anduviste?
Estuve jugando en Italia de muy pibe, me fui a los 16 y ya, aunque soy joven y tengo 23, estoy en el fin de la carrera porque tuve muchas lesiones, muchos problemas y se complica cada vez más

¿Por qué te fuiste tan chico?
Hice las inferiores en River hasta que me entere que tenia pasaporte italiano y un representante me ofreció ir a jugar a un club de Europa. Mandaron videos al Empoli de Italia, trataban de venderme por donde podían. Me vio el Empoli, les guste y me mandaron los pasajes para irme a jugar a allá. Apenas me entere largué todo, estaba re contento, era la persona más feliz del mundo. Estuve un año en el Empoli, jugué un par de partidos en primera, pero nunca oficiales, jugué partidos por la copa Italia, pero por el campeonato nunca. Igualmente jugaba en la primavera, lo que se llama la reserva acá.

¿River te puso alguna traba para irte?
No. Lo que pasa es que los últimos años en River se me estaban complicando por el tema del colegio. Yo estaba yendo a uno doble escolaridad y en el colegio de River no había cupos. Entonces tuve que elegir entre el colegio y el fútbol. Estuve seis meses sin jugar porque para ir a River a entrenar me tenía que ratear del colegio y mi vieja me quería comer. Era una situación muy extrema, siempre mintiendo que estaba en el colegio y en realidad estaba entrenando.

¿Te acordas de algún compañero tuyo que llegó a primera?
Si jugaba con Javier Mascherano, él es más grande, pero nuestras categorías la 84 y la 85 entrenaban juntas. También Maxi López, Juan Pablo Carrizo, Rubens Sambueza, Andrés D´ Alessandro, Javier Saviola. Ellos eran mucho más grandes, pero algunas veces nos mandaban a entrenar con la reserva. Igual en ese momento no eran gran cosa. Con Carrizo y Maxi López fuimos muy amigos.

¿Que pasó en el Empoli?
El club no uso la opción que tenían para comprar mi pase. Lo que me pasó fue que aparte de irme tan chico, me fui con un representante que tampoco tenía mucha experiencia. Esta gente no sabe lo que hace: piden fortunas por chicos que no son nadie. Porque en mi caso yo no había jugado ni en la primera de River ni en ningún lado. Todos piensan que los tanos no saben nada y es totalmente lo contrario. Nosotros, los argentinos, pensamos que somos los más vivos del mundo y a final es totalmente lo contrario.

¿Cómo siguió tu vida después del Empoli?
Después del Empoli estuve en el Verona, en el Udinese y en otros clubes más. Pero al ser muy chico es muy difícil jugar en primera. Además de tener muchas condiciones tenes que tener a alguien que te banque. Tenes que tener un representante muy bueno que este siempre atrás de los entrenadores haciendo regalitos, hay mucha competencia en ese sentido más en Italia que hay mucha mafia en el fútbol.

Hay más relaciones públicas que juego…
Exacto.

¿Llegaste a jugar o a entrenar con figuras importantes?
Estuve con Romario cuando jugaba en Australia, ahí estuve 6 o 7 meses. Me acuerdo que en esa época se creo una liga especial en Australia, supuestamente era la Premier League de Inglaterra, ahí estaban los mejores equipos de Australia y traían los mejores jugadores del mundo. Era como Qatar, como cuando llevó a Batistuta. Es más, a Batistuta lo llevaron a Australia, no estaba en mi mismo club sino en otro. Y empezaron a traer a los mejores jugadores del mundo: vino Romario, Andy Cole que jugaba en el Manchester.
Con Romario jugué dos amistosos, pero cuando lo tenía al lado me moría. Encima solo hablaba conmigo porque no tenia idea del inglés. Hablamos en Español, pero imagínense mi vergüenza por tenerlo al lado, era como estar con Maradona.
Me acuerdo que era un partuzero, salíamos juntos. Llegábamos y se para todo el boliche y todos entrábamos atrás de él. El tipo igual era humilde al 100%. Y allá como el fútbol no era el deporte principal, no fue difícil.

¿Como fue estar Lejos de casa en plena adolescencia?
No les voy a mentir, no fue complicado porque yo, sinceramente, moría por el fútbol. Lo siento ahora como lo sentía antes. No me importó nada y me fui. Le dije: “mami me tenes que dejar ir porque sino me muero”. Porque no sabía si se me iba a presentar una oportunidad así más adelante. Después obviamente empecé a extrañar a mi familia. Pero estaba haciendo lo que más me gustaba en el mundo y estaba contento. Estos últimos años me empezó a costar más.

¿Cómo fue haber llegado a Europa y darte cuenta de que no era lo que te habían prometido?
Fue jodido. Durante el primer año pasaron muchas cosas. Me decían que iba a tener una casa, un auto, que me iban a pagar 15.000 euros por mes y yo no lo podía creer, era el pibe más feliz del mundo. Hacia lo que me gustaba y encima me pagaban, pero al final terminó siendo todo lo contrario.
Allá vivía en un departamento con chicos brasileros y hace 5 años atrás ya había crisis en el fútbol así que imagínense lo que es ahora. Te prometían que el mes siguiente te iban a pagar todo lo que te debían, aun teniendo contrato profesional. Yo no tenía a nadie que me defienda porque el representante que me llevó me dejó abandonado. Así como hizo conmigo lo hacen con millones de chicos que conozco. Cobran su porcentaje y se van. La mayoría hace eso, no es uno son muchos.

¿Ahora cómo te manejas? Debes tener muchos más cuidados que antes.
Ahora estoy sin representante, pero siempre recibo ofertas. Hace una semana me llamaron de los Emiratos Árabes, pero se que es más de lo mismo porque antes de irme a Australia ya me lo habían ofrecido. Viene de la misma gente: te prometen mucha plata, la que acá no vas a ganar nunca, pero te prometen una cosa y te terminan dando otra.
¿Y hoy cómo es tu vida?
Hoy tengo los ligamentos rotos, estoy en La Argentina tratando de rehabilitarme lo más rápido posible porque no aguanto estar así. Quiero estar bien para ir a jugar un partido con mis amigos. Extraño jugar con mis amigos, divertirme. Ahora quiero recuperarme para estar bien.

¿No estas atento al mercado argentino?
No, la verdad que acá en Argentina es muy difícil. Acá hay un millón de chicos y siempre hay uno mejor que vos. Sin un representante bueno y si no sos un Messi acá no jugas en ninguna parte. Tenes que ser un diferente, un destacado totalmente, no alcanza con jugar muy bien. Atrás del fútbol hay muchas cosas, es muy complicado

Es increíble que con tan solo 23 años estés diciendo que tu carrera este casi terminada...
En estos 6 meses que estuve lesionado empecé pensar en otras cosas, empecé a trabajar en el Ministerio Publico Fiscal para hacer algo y para despejarme. Una de las cosas que hice mal fue haber dejado el colegio. Ahora estoy tratando de terminarlo, de ver otras posibilidades, de no quedarme solo con el fútbol porque ya a mi edad… Estoy diciendo que estoy viejo y solo tengo 23 años, no se entiende, pero el fútbol es así, es muy complicado.